Soundtrack de la revuelta

68 rpm/2

Por SERGIO MONSALVO C.

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¿Por qué los alcances de la sonoridad sesentera? Esa que aún repercute y convive en el presente. La respuesta a esa pregunta es que no hay movimiento alguno sin banda sonora, sin soundtrack. Es decir, ninguna corriente sociopolítica que proteste, que se inconforme, ninguna acción cultural, ningún levantamiento de voz en el ámbito que sea tendrá significancia o trascendencia si no es acompañado, envuelto y avalado por una música característica y representativa. La del 68 la tuvo.

 

BOOGIE WITH CANNED HEAT (14)

CANNED HEAT

Boogie with Canned Heat fue el primer gran logro artístico del grupo, en el que la identidad bluesera se reveló clara y auténtica. En “On the Road Again”, un tema que se volvió clásico, apareció uno de los solos más sublimes de la armónica en la historia del rock. Alan Wilson (“El Búho”) produjo una joya con esta pieza. Era boogie de refinada delicadeza.

 

LIVING THE BLUES (15)

CANNED HEAT

La “identidad” se desbordó (con Dr. John como invitado), en una versión de “Refried Boogie” en vivo, una celebración pagana al dios del blues al estilo de Bob Hite (“El Oso”). Otra gran aportación de Wilson fue “Going up the Country” (quien la compuso y cantó con voz frágil, aguda e irreal). Un himno que reaparece consagrado en el soundtrack de la película Woodstock.

 

BOOK OF TALIESYN (16)

DEEP PURPLE

Sus piezas hablan de mundos evolucionados con mitos e historias, como el que da título al disco. Con la presencia de Ritchie Blackmore en esta época dorada los temas formaron unidades indisolubles. Creó con su guitarra una motivación fabulosa, viva y en peregrinación ininterrumpida hacia los oídos pasmados de los escuchas. Portada: Ilustración John Vernon Lord.

 

SHADES OF DEEP PURPLE (17)

DEEP PURPLE

Con ellos arribaron al planeta ritmos más potentes y agresivos, producto del uso de las guitarras distorsionadas, las baterías de doble pedal y bajos más pronunciados. Surgieron en la Gran Bretaña como tótems del rock y delimitaron las bases de un nuevo género, el hard rock. Deep Purple puso énfasis en la creación de una obra fundamentada en las escalas y los arreglos.

 

THE GRADUATE (18)

SIMON & GARFUNKEL

El dúo publicó dos discos en 1968. El primero reunía algunas canciones que se habían convertido en la banda sonora de The Graduate (El graduado), del director Mike Nichols. La cinta despertó pasiones, se brincó algunas convenciones y habló de lo complicadas que pueden ser las relaciones humanas y con un soundtrack que quedó impreso en la memoria colectiva.

 

BOOKENDS (19)

SIMON & GARFUNKEL

El binomio fue considerado la encarnación máxima de las canciones melancólicas, suaves y preciosistas. Sus baladas reflexivas ofrecían además un sonido prístino que permitía disfrutar de su armónica conjunción vocal, del mejor cancionero y de su simbolismo emocional. “Mrs. Robinson” se incluyó en este disco. Portada: Fotografía de Jim Marshall.

 

CHEAP THRILLS (20)

THE BIG BROTHER & THE HOLDING COMPANY

“Cantar es tomar un sentimiento y convertirlo en algo terminado y que luego, pasado por las cuerdas vocales, trate de crear un sentimiento igual en la gente que te ve y oye”, decía Janis Joplin al respecto. Con esa idea entró con el grupo al estudio para grabar Cheap Thrills. Su carisma vocal llevó al LP a la cima de las listas de popularidad. Portada: Robert Crumb.

 

CREEDENCE CLEARWATER REVIVAL (21)

CREEDENCE CLEARWATER REVIVAL

El grupo no era ajeno al rock psicodélico. El sonido del vibrato extendido en la guitarra está presente en sus temas y en las versiones blueseras largas y reflexivas («Susie Q», “I Put a Spell on You”) donde recrea atmósferas e imaginerías. Su originalidad radicaba en el punto de observación: el correr de un río legendario, el Mississippi. Portada: diseño de Laurie Clifford.

 

CROWN OF CREATION (22)

JEFFERSON AIRPLANE

Dos piezas destacan por su significado: «Lather» y “Triad». La primera, escrita por Slick, trata sobre su relación con alguien que iba a cumplir los 30 años de edad (una frontera muy especial para la cultura juvenil de aquellos días). Y «Triad» provocó polémica por su contenido (un ménage à trois). Portada: Hiro, fotos de portada y contraportada, J. Van Hamersveld, diseño.

 

CRUISING WITH RUBEN & THE JETS (23)

THE MOTHERS OF INVENTION

Este disco expresó de forma abierta el amor de Zappa por el doo-wop, esa corriente melosa, sentimental, suave, del rock and roll cincuentero. Homenaje con humor paródico a los sonidos que disfrutó en su adolescencia. Nadó contra todas las corrientes, cosa que le confirmó su sentido de aislamiento y procuró disfrutar de ello. Portada: diseño Cal Schenkel.

 

WE’RE ONLY IN IT FOR THE MONEY (24)

THE MOTHERS OF INVENTION

Es un álbum conceptual, una obra maestra de Zappa, un disco clásico y pieza destacada del canon rockero. Puso énfasis en lo orquestal, en lo experimental y con ideas acerca de la música concreta. Se mofó de todo y de todos, incluyendo la cultura hippie. Portada: parodió la portada del Sgt. Pepper de los Beatles, diseñada por Cal Schenkel, fotografiada por Jerrold Schatzberg.

 

THE CRAZY WORLD OF ARTHUR BROWN (25)

ARTHUR BROWN

La aparición de The Crazy World of Arthur Brown (músico y performer) marcó la posibilidad de sonar más duro y raro de lo que se acostumbraba; de desplazar los límites visuales al añadir el valor de una perturbadora actuación en vivo. Con ello se certificó el concepto de un nuevo subgénero: el shock rock. Portada: David Montgomery, fotografía; David King, diseño.

 

DANCE TO THE MUSIC (26)

SLY & THE FAMILY STONE

La propuesta de esta banda en 1968 contenía el espíritu de la época (amor, paz, integración…), era multirracial, sin fronteras de género (masculino, femenino y demás) y puso a interactuar al funk con el rock, el soul, el gospel, la psicodelia, el pop, el jazz y el r&b. Creó una línea de bajo determinante para el futuro del jazz y luego del hip hop. Portada: Foto del grupo.

 

THE DOCK OF THE BAY (27)

OTIS REDDING

El destino intervino para que se convirtiera en un éxito. Un álbum que la Stax armó tras la muerte de Redding (y la de toda la banda The Bar-Keys que lo acompañaba en las giras) en un accidente aéreo, días después de haber grabado el tema principal. El álbum se convirtió en el primer disco póstumo de la historia. Portada: Foto de archivo de Stax Records.

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