501. The last poets: El rap sin impostores

Por Sergio Monsalvo C.

Harlem, Nueva York, 1968. Del taller de escritores negros East Wind surge un colectivo compuesto de 11 integrantes, The Last Poets. El grupo toma su nombre de un discurso del poeta sudafricano Little Willie Copaseely, quien afirma que este tiempo produciría a los últimos poetas (“The only poem you will hear will be the spearpoint pivoted in the punctured marrow of the villain…therefore we are the last poets of the world”).

De aquí en adelante, la poesía será utilizada como rifle. Sus principales fuentes de inspiración serán las ideas políticas del líder negro Malcolm X y la religión musulmana. En los discos, los textos hablados, rimados y revolucionarios serán acompañados por funk, jazz y ritmos africanos de percusiones.

Su música directa y decidida les ganó desde entonces mucho respeto y llegaron a colaborar, entre otros, con Art Blakey y Jimi Hendrix (Doriella du Fontaine, 1970). La formación del grupo, a través del tiempo, fue cambiando con frecuencia, así como las disputas ideológicas entre sus componentes (incluyendo una por la posesión del nombre).

Mientras tanto, Jalaludin Mansur Nuriddin (Jalal) era el único poeta y cantante que quedaba de los integrantes originales. A mediados de los ochenta decidió establecerse en Londres, donde comenzó a formar parte de la floreciente escena del jazz-dance (otros miembros prominentes y posteriores como Omar Ben Hassan y Abiodun Oyewole continúan actuando bajo el mismo nombre).

Hoy, suele considerarse a The Last Poets como los abuelos del arte verbal del rap. Y aunque Jalal estuvo consciente de que habían ejercido influencia («Pusimos el hip en el hop»), no quiso que se les tomara como una subdivisión de dicha cultura. El rap ejecutado en la actualidad constituía, a sus ojos, un alejamiento del arte original, tal como fue desarrollado por The Last Poets.

Para él, el rap no era más que una conversación cualquiera que se originó en el jail toasting, en la jerga de las cárceles. Ellos separaron esta forma de comunicación de su contexto social y desarrollaron un arte propio. Así, el concepto adquirió un nuevo significado literario y político. Jalal y su grupo llamaron a este nuevo estilo Spoetry (speaking poetry rapidly).

Veinte años después del surgimiento del grupo, Jalal continuaba desmarcándose de la corriente rapera, sobre todo del gangsta, al afirmar que todo el hip hop (protagonizado entonces por Run DMC y L. L. Cool J) era sólo un viaje egocéntrico.

A la postre, sin embargo, las nuevas evoluciones del género, como el radical rap y el Afrocentricity lo obligaron a cambiar de opinión.  «Ahora estoy  .  El potencial existe, pero debe adoptar una política más clara. La diferencia entre mi poesía y los raps del hip hop es igual a la diferencia entre el drama y una caricatura. Sus diálogos sólo sirven para divertir. Lo que yo hago se refiere a la realidad y expresa los traumas resultantes de la represión, la aversión y la depresión», dijo.

Su arte creció y luego, tras todo lo pasado en el mundo tras el 11-S, Jalal sustituyó su papel como musulmán militante por el de gurú. “El Islam—afirmaba— es únicamente otra forma de vivir, ni más ni menos».

En su opinión, las organizaciones negras radicales como Nation of Islam y la Five Percent Nation, surgida de aquélla, y que constituyen una gran fuente de inspiración para los artistas noveles del hip hop, eran demasiado miopes y prefería ocuparse con cosas más importantes como el yin y el yang, Buda, la sabiduría, el conocimiento, la moral y la conciencia.

Nunca se apartó del precepto estético original de que el ser humano debe luchar desde la cuna hasta la tumba.

Sin embargo, la conciencia negra no era lo que más le preocupaba a este decidor. En el comienzo del siglo XXI enfocó los problemas desde una perspectiva mundial. Hizo hincapié en que el contenido de la poesía de The Last Poets tenía que ver, en primer lugar, con la presentación de un mensaje político, derivando, en cuanto a su forma, de la tradición del arte narrativo oral africano. Por lo tanto, en primer plano está la comunicación directa, el encuentro franco entre el autor y el receptor.

En los sesenta The Last Poets sacaron su mensaje a las calles de Harlem, a fin de despertar la conciencia de la población acerca de su miseria. El marco musical era proporcionado sólo por instrumentos de percusión como hasta la fecha. Nunca quiso nada de electrónica, aunque sí realizó algunos proyectos con tal acompañamiento, por ejemplo Mean Machine, con el DJ del hip hop D.S.T. y unas cuantas cosas con Bill Laswell. Sin embargo, sólo fueron momentos.

Su lema era: “Si no lo puedo cargar, no lo necesito. ¿Qué haría si alguien jalara el enchufe? —preguntaba sardónicamente—. No quiero tener que depender de nada más que de mí. Yo mismo soy el arte».

Opinaba que sus herederos musicales no eran la generación actual de raperos, sino Galliano: un mezclador y músico londinense blanco salido del barrio negro de Brixton que había mostrado el mismo aprecio por Coltrane que por Public Enemy.

Su principal crítica contra los raperos actuales era su limitación para presentar las ideas. «Les va bien porque los medios comerciales les dan espacio. Pero no presentan nada nuevo, sólo hablan de cuestiones locales. ¡No investigan nada!  Deberían pensar sobre el origen y las consecuencias de la violencia política en el mundo entero. El rap centra únicamente su atención en los jóvenes; nuestro mensaje, en cambio, se dirige incluso a las abuelas”.

Jalal también llevó una vida paralela como solista bajo el nombre de Lightnin’ Rod, en el que cambiaba el arrebato político por  la de relator del realismo sucio. Habló de la miseria y la cotidianeidad de los barrios bajos negros, de sus personajes y trajines, como en el emblemático Hustlers Convention, que influyó notablemente en los gangstas.

Vivió de acuerdo a sus principios antimaterialistas y pasó penurias económicas, que paliaba con sus giras por Europa, para terminar acogiéndose a la buena voluntad de su familia en Atlanta, Georgia, lugar donde murió el 4 de junio del 2018 a la edad de 73 años.

Discografía selecta: Last Poets (Douglas/Celluloid, 1970) This Is Madness (Douglas, 1971, 2002) Chastisement (Blue Thumb, 1972) Delights of the Garden (Douglas, 1977); Jalal: On the One (EFA, 1996), Science Friction (Submix, 2004), Hip-Hop samit sharma Docktrine – The Official Boondocks (2006), Rhythms of the Diaspora Vol. 2 (2008), The CornerCommon, «Be» (2005), Project Roach & You Can’t Stop Us Now – Nas, «Untitled» (2008), Made In Amerikkka – Reuniting The Last Poets (2008).

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